César Díaz recuerda que esta primera fase del proyecto incluye también los primeros pasos para ejecutar la zapata de la nueva valla que separará la zona portuaria de la ciudad y trabajos en las canalizaciones
El Ayuntamiento de Santander sigue avanzando y lo hace a buen ritmo en los trabajos para el derribo de los tinglados de Antonio López, tal y como ha avanzado el concejal de Fomento, César Díaz, quien ha explicado que de las tres naves existentes ya se han derribado dos –la 1 y la 3- y que solo queda la número 2 en pie pero que su demolición se ejecutará la próxima semana.
Ha recordado que estamos ante la primera fase del proyecto, en la que también se incluyen las labores iniciales para ejecutar la cimentación de la nueva valla que separará la zona portuaria de la ciudad y los trabajos en las canalizaciones de servicios.
El concejal de Fomento ha puesto en valor la próxima transformación de la calle Antonio López, que se convertirá en un gran paseo a principios de 2022, tras el derribo de los tinglados y la posterior renovación urbana del vial.
Con estas obras, que ejecuta la empresa SIEC y suponen una inversión municipal de 1,5 millones de euros, Santander dará continuidad al paseo marítimo desde el nuevo centro cívico de Tabacalera hasta la Biblioteca Central, conectando con el entorno del Barrio Pesquero, impulsando también la revalorización de la zona, sin perder aparcamientos.
Al igual que en el arranque de las obras, a finales del pasado mes de mayo, desde el Consistorio se pide disculpas a los ciudadanos y especialmente a los vecinos por las molestias que los trabajos ocasionarán en el entorno.
“Con este proyecto vamos a ganar 2.500 metros cuadrados más de espacios portuarios para uso ciudadano que nos permitirán seguir poniendo en valor esta zona de Santander que ya concentra importantes dotaciones y equipamientos y acercarnos más y mejor a un barrio con tanta historia y personalidad como es el Barrio Pesquero”, ha añadido el edil.
El proyecto es fruto del convenio de colaboración suscrito entre el Ayuntamiento y el Puerto, y posible gracias a que en su momento Iñigo de la Serna, al frente del Ministerio de Fomento, dotó al Puerto mediante el Fondo de Compensación Portuaria de un millón de euros para que pudiesen trasladar los talleres que ocupaban los tinglados a otra zona.
El concejal de Fomento ha recordado los detalles del proyecto por el que la calle Antonio López, -que ahora tiene una anchura de 14 metros-, ganará 8,5 metros más hasta situarse en los 22,5 metros, una superficie que se añadirá a la acera que discurre junto a los edificios para conseguir un gran paseo peatonal.
Las obras, que afectarán a una superficie total de 8.245 metros cuadrados, permitirán además aumentar la anchura del carril bici que, en su tramo final, se separará del parque infantil, como propusieron los vecinos, evitando las interferencias entre ciclistas y usuarios que se producen actualmente junto a este parque, y se aprovechará para prolongarlo hasta el acceso a la Biblioteca Central y facilitar el desplazamiento en bicicleta hasta este equipamiento.
En el primer tramo de la calle, -frente al nuevo centro cívico Tabacalera-, y en el extremo final (el más cercano a la calle Ruiz Zorrilla), el vial se colocará al nivel de la acera, de manera que el peatón tendrá prioridad al convertirse en zonas semipeatonales.