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La alcaldesa ha presentado esta propuesta cuya idea es inundar las redes sociales con besos, mostrar al mundo entero la belleza y la diversidad de los vínculos emocionales que se forjan en la ciudad
Santander se va a convertir, a partir de mañana y hasta el 11 de agosto, en la ciudad del beso gracias a una nueva iniciativa dentro de la exposición inmersiva ‘El oro de Klimt’, que puede visitarse en el Palacio de Exposiciones.
La alcaldesa, Gema Igual, ha presentado esta propuesta cuya idea es inundar las redes sociales con besos, mostrar al mundo entero la belleza y la diversidad de los vínculos emocionales que se forjan en la ciudad.
Acompañada por la concejala de Cultura, Noemí Méndez, y por la responsable de Nomad Art, Berenice Ponce, Igual ha recordado que, aprovechando la circunstancia y el poder del arte para inspirar y conectar a las personas, la productora responsable de la exposición ha lanzado esta iniciativa que busca el beso de Klimt, pero esta vez, en las calles de Santander.
Tal y como ha detallado, el concurso se llevará a cabo a través de la plataforma Instagram, utilizando el hashtag #klimtbesasantander y los participantes podrán compartir sus fotos de besos tomadas en las calles de Santander.
“Queremos que esta iniciativa sea una celebración de la diversidad y la inclusión. No importa quiénes sean los protagonistas del beso, sino la emoción y la conexión que se transmita a través de la imagen. Queremos que las personas se sientan libres para expresar su amor y cariño de la manera que más les inspire”, ha subrayado.
En este sentido, ha informado que un jurado, conformado por expertos en arte y representantes de Nomad Art y el Ayuntamiento de Santander, con conocimientos en arte y con una visión sensible y apreciativa de la belleza, será el encargado de seleccionar la imagen ganadora entre todas las fotos publicadas.
El fallo del jurado se dará a conocer el 16 de agosto a través de las redes sociales y los medios de comunicación y la foto ganadora recibirá un premio especial que incluye un cheque valorado en 100 euros para adquirir merchandising de la exposición de Klimt y un pack de 4 entradas para visitar el Museo Nomad de Madrid.
“Esta iniciativa es una oportunidad para que todos los habitantes de Santander y los visitantes de nuestra ciudad se unan en una experiencia única. Queremos fomentar el arte, la creatividad y la conexión humana. Queremos que cada beso capturado en una fotografía sea un testimonio del amor y la belleza que se encuentran en cada rincón de Santander”, ha remarcado.
Por ello, ha invitado a santanderinos y visitantes a participar en la iniciativa ‘El beso de Klimt’, con el fin de demostrar al mundo que Santander es una ciudad llena de amor, ternura y pasión.
Exposición
El Palacio de Exposiciones acoge hasta el mes de septiembre la exposición ‘El oro de Klimt’, una muestra multimedia que sumerge al visitante en el fascinante mundo del artista austriaco.
En esta ocasión, además, la exposición va más allá de la proyección inmersiva. Además de deleitar con esta experiencia única, se puede disfrutar de una selección de trajes de alta costura, cortesía del Museo Automovilístico y de la Moda de Málaga, que establecen una conexión estética con la pintura de Klimt.
De esta forma, se enriquece la exposición, introduciendo elementos diferentes y generando un interesante diálogo entre el arte y la moda.
Al visitar el Palacio de Exposiciones, el visitante se puede encontrar con la proyección inmersiva que sumergirá en el universo de Klimt. Pero eso no es todo, también puede adentrarse en una recreación del estudio del pintor, un espacio de dibujo para niños y adultos, y una zona dedicada a resaltar la importancia de la mujer en la vida y obra de Klimt. Los visitantes obtienen una experiencia completa, que abarca distintos aspectos de la vida del artista y que resalte su visión única.
La muestra estará abierta al público de forma ininterrumpida desde las 09.00 a las 23.00 horas, todos los días hasta el 17 de septiembre.
Más sobre Klimt
Considerado por la historia del arte como el mayor exponente del modernismo y simbolismo que se desarrolla en la ciudad de Viena poco antes de 1900, Gustav Klimt nació el 14 de julio de 1862 en Baumgartem (Austria) en el seno de una familia humilde.
Su pintura es extremadamente ornamental gracias, en parte, a la educación artística recibida y a la influencia de su padre. En ella abunda el oro propio del arte bizantino, las corrientes del Oriente antiguo y nuevo, los ornamentos geométricos o el erotismo y la sensualidad del prerrafaelismo italiano e inglés.
Las obras de Klimt suponen una auténtica delicia para los ojos: seducen, inquietan y paralizan, despertando en el público todo tipo de emociones escondidas. Se trata de un arte en constante choque entre el dinamismo de los mundos interiores y los acontecimientos exteriores acaecidos durante su elaboración. Es arte, artesanía, ornamentación llevados de la mano de la delicadeza y sensualidad de uno de los mejores artistas de la vanguardia europea.
