Al igual que en el resto de ámbitos, se acaban las cuarentenas por contacto estrecho, que implican el fin de los cierres de aulas
Santander – 04.03.2021
La Consejería de Educación y Formación Profesional ha traslado hoy a los centros educativos la flexibilización del Protocolo de organización que rige desde el inicio de la pandemia con, entre otras medidas, la posibilidad de que distintos grupos de convivencia estable puedan interactuar también en espacios interiores y la interacción sin restricciones de todo el alumnado en exterior, en ambos casos en el nivel de riesgo controlado y en los escenarios 1 y 2, y la recuperación de las salidas que impliquen pernocta.
Además, y en aplicación del acuerdo de la Comisión de Salud Pública, que ha aprobado la eliminación de los aislamientos para los contactos directos de personas infectadas, estén o no vacunados, finalizan las cuarentenas también en el ámbito educativo, lo que supone que ya no se cerrarán aulas ante la aparición de casos positivos.
Todos los cambios han sido consensuados entre las consejerías de Educación y Formación Profesional y la de Sanidad, a través de la Dirección General de Salud Pública.
Para la consejera, Marina Lombó, se trata de un paso “muy importante hacia la normalización de la vida en los centros, que ha sido muy esperada durante dos años”. “El lunes, colegios e institutos se parecerán más a los lugares que eran antes de la pandemia, y es una noticia que me alegra por toda la sociedad, pero especialmente por los niños y jóvenes, a quienes les hemos exigido mucho y han tenido un comportamiento ejemplar”, ha dicho.
“Poder jugar en recreos sin preocuparse más que por disfrutar, que vuelvan las excursiones de más de un día, poder realizar actividades con otros grupos… son cuestiones fundamentales para el desarrollo del alumnado y por fin vuelven”, ha resumido.
Lombó ha subrayado que Cantabria ha tenido un protocolo “muy riguroso” desde el inicio de la pandemia, “que ha funcionado gracias al compromiso y la responsabilidad de toda la comunidad educativa”. “Ahora ha llegado el momento de dar un paso más hacia la tan ansiada normalidad”, ha dicho. En este sentido, ha recordado que la situación hoy “nada tiene que ver” con la de inicios de enero, y ha subrayado que esta semana, “por primera vez en mucho tiempo”, no se ha decretado ninguna cuarentena. “Parecía que este momento no iba a llegar, pero por fin podemos relajar de verdad el protocolo”, al tiempo que ha solicitado a toda la comunidad educativa “seguir manteniendo un adecuado uso de la mascarilla en interior hasta que las autoridades sanitarias nos indiquen lo contrario”.
Por último, ha lanzado un mensaje de “profundo agradecimiento” a los equipos directivos, al personal docente y no docente de los centros por su “trabajo, esfuerzo y compromiso” con el mantenimiento de la docencia presencial. “Han sido tres cursos muy difíciles y toda la sociedad, estoy convencida, es hoy más consciente de que la Educación es un servicio esencial que funciona gracias a la implicación de sus profesionales”, ha finalizado.
Cambios en el protocolo
Hasta ahora, en los espacios interiores no podía relacionarse el alumnado de distintos grupos de convivencia estable. A partir del lunes podrán hacerlo, pero con ciertas restricciones. En concreto, se replica el modelo que regía en exteriores, es decir, podrán relacionarse todos los alumnos del mismo curso en aquellos centros que tengan tres o más líneas. En los centros más pequeños, las agrupaciones serán: dos niveles distintos, siempre del mismo ciclo, en los centros con hasta dos líneas (incluidas); toda la etapa en los centros de una sola línea y, finalmente, todo el alumnado del centro en escuelas unitarias o Centros Rurales Agrupados (CRA).
En exteriores la interacción no tendrá restricción alguna, y podrá organizarse según los criterios habituales de cada centro dentro de su autonomía de organización.
En ambos casos, estos supuestos están contemplados para la situación de riesgo controlado y los escenarios 1 y 2. Cantabria está actualmente en el escenario 1.
A pesar del fin de las cuarentenas, Educación mantendrá la liberación horaria de los coordinadores COVID hasta final de curso. Así, y aunque ahora ante la aparición de síntomas serán las familias las encargadas de contactar con los servicios sanitarios para, en su caso, la realización de las pruebas diagnósticas pertinentes –a excepción de en los centros de Educación Especial, donde se seguirá funcionando como hasta ahora- esta figura se sigue considerado imprescindible. En concreto, serán las personas a las que la Consejería comunicará los casos positivos. En estos supuestos, el coordinador COVID será el encargado de comunicar a las familias la recomendación de extremar las precauciones durante los diez días posteriores a la última exposición (reducir las interaccione sociales y evitar el contacto con personas vulnerables).
Por último, se levanta la obligación de que el alumnado de entre tres y cinco años porte mascarilla en los servicios complementarios (comedor y transporte).